Visita al asilo San Vicente

Aquí íbamos llegando al asilo... nos encontramos con una agradable persona pero no recordamos su nombre porque nos decía nombres diferentes a cada rato y a todos nostros nos puso nombres jajajajá, a mí me puso "Macario Ortega" jajajá, este hermoso anciano fue muy bello y lindo con nosotros y aunque no nos podía escuchar bien se portó de maravilla.

Aquí estábamos sirviendo y preparando las galletitas para que los ancianos comieran. Agradezco de nuevo a Dios por habernos enviado y por poner en nuestros corazones el querer como el hacer. Servirle a Dios y al prójimo esto es tan bello que se nos está conviertiendo en una adicción.

Platicar con esta ancianita fue algo hermoso, al hablar con ella nos dimos cuenta de que tenía mucha sabiduría, nos contó muchas cosas de su vida y lo sorprendente fue que tenía cataratas por tanto leer, pero por su enfermedad ya no puede hacerlo. Nosotros le prometimos irle a leer libros cada vez que fuéramos a visitar a los ancianos, entonces ella nos pidió de favor que lleváramos libros románticos jajá. ¡Hermosa!

Pero este anciano no quería que le trajéramos libros para leer sino que nos dijo que le lleváramos "HEMBRITAS" jajajajajá...
Fue maravilloso encontrar a una ancianita que era cristiana como nostros, le dolía la cabeza porque sus compañeras estaban cantando, entonces oramos por ella y nos dijo: "¡Ya, ya no me duele!". Nos preguntaba que si eramos de la Iglesia de Dios pero ninguno le entendimos hasta que nos cayó el veinte y le dijimos que sí, después nos comentó que ella se congregaba también ahí; me sorprendería si a la próxima mision nos encontramos con otro cristiano jajajajá, esperemos que sí.
Dios les bendigaa... Shalom.










Visita al basurón

Esta foto fue tomada en la visita y entrega de ropa al basurón en Cd. Obregón, aquí se muestra a dos niños los cuales al ver que teníamos bendiciones para ellos se pusieron contentos, bueno almenos la niña y el niño les daba pena y decidieron esconderse.
Fue una experiencia hermosa y ala ves triste, ya que vemos que hay tanta pobreza en nuestro país y que las autoridades y los que tienen dinero no hagan nada.

Sin embargo, aunque no tenemos dinero ni altos puestos está con nosotros un Dios poderoso que nos ha dado un corazón para ayudar en lo que podamos a estas hermosas personas, sin que nos importe su color de piel o su un nivel económico desfavorecido, porque también ellos son hijos de Dios, y por lo tanto, nuestros hermanos.

A estos niños aparte de ropa se les regaló el libro de Mateo y Juan, ellos mostraban mucho interés por ver lo que había en ellos. Le doy gracias a Dios porque fue una experiencia maravillosa ver a tantos niños y señoras sonreir de agradecimiento porque alguien pensó en ellos, nosotros también sonreríamos de agradecimiento porque Dios nos ama igual a todos sin excepción.
Algo impresionante pasó en ese dia: ya nos quedaba poquita ropa o almenos en uno de los carros pero Dios mostró su amor ya que empezamos a sacar ropa que jamás habíamos visto y que no sabemos de dónde salió... estamos conscientes de que Dios quería que todas estas personas fueran bendecidas y multiplicó la ropa, y sí, absolutamente nadie falto y nos sobró demasiada

En esta foto pueden ver la cantidad de ropa que les dimos y a todos les dimos casi igual.

También fue hermoso ver que entre estas personas habían hermanos cristianos, como este señor que todos estabamos sorprendidos de la sabiduría y la amabilidad que había en él, se dio cuenta que lo que hacíamos era porque el Señor nos lo pusó en el corazón, y agradeció a nuestro Padre por la bendición y luego a nostros por haber llevado a cabo esta obra que para nostros fue una hermosa experiencia.

Dios los bendiga... Shalom.